
Parece que uno de los gastrotemas del momento es la movida de los Adrià en Paral.lel/Entenza: ya ha abierto la coctelería y en nada abre lo de las tapas. Aquello va a ser como Port Aventura por lo que veo, con tanta expectación. Pero yo no voy a hablar de una apertura, si no de una transformación.
Wushu cerró en diciembre, y renace reconvertido...en otra hamburguesería. Gourmet, pero hamburguesería. Se llama
Kiosko, y supongo que los de Wushu visto el éxito de Bacoa, la primera hamburguesería que abrieron en el primer y antiguo emplazamiento de Wushu tras el Mercat de Sta Caterina, les debe salir más rentable seguir esa moda, la de las hamburguesas de calidad. Que no dudo que serán buenísimas, pero esos curry thai de Wushu (y a esos precios, con ese menú de mediodía), dónde los comeré ahora? (Ya, ya tengo respuesta:
El petit Bangkok, que sigue imbatible pero me queda más lejos)
El otro gran tema de estos días es lo de los delicatessen para pijos. Grandes gabinetes de prensa que tienen, añadiría yo. He leído en mil sitios estos días sobre Cornelia & Co y Mary's Market. Cornelia es más una cafetería que una tienda, con lo incómodo que se hace comprar entre mesas, y tanto en un sitio como en otro todo es muy apetecible, pero vaya precios. Ni el Opencor, oigan. Pero esta moda me permitió descubrir una perla (qué poético):
Oriental Delicatessen (Sicilia 212), que apareció en el reportaje del último Que Fem de La Vanguardia. Resulta que es una gran tienda en donde encontrar todo (y más) lo que se encuentra en los supermercados chinos o asiáticos más auténticos pero en plan bien decorado y limpito. Y los precios, muy ajustados me parecieron, casi todo igual o más barato de lo que lo compro habitualmente. El Supermercado Honesto, en Diputació/Roger de Flor, con esa pescadería china es más auténtico, pero tienen menos surtido. Que lo sepan.