Atica

Ya tocaba gastro-post. Iba a hablar primero del fantástico menú de mediodía del MIU, copiado y mejorado del Kibuka (se ve que no sólo se han llevado los cocineros si no también las ideas) Por 10, 95 €, un entrante, 8 makis, plato caliente, bebida y postre. Y todo riquísimo, estuvimos el lunes. Pero el viernes celebramos un multicumple, en el ATICA (Galileu 159), en Sants-Les Corts, y me voy a centrar en esa cena. El sitio es como un bar de barrio, bastante feíto y con mala extracción de humos. Eramos 9 y nos colocaron en una especie de comedor interior. La carta, cortísima, pero todo estaba riquísimo. No tenían sardinas, así que uno de los platos estrella (la coca de sardinas con cabello de ángel y pistachos), no lo pudimos probar. Yo acerté plenamente:

Chipirones con crema de calabaza.

Peus de porc sense nosa. Sobre una base de patata, deshuesados, riquísimos.

Y de postre, las torradetes con chocolate, sal y aceite de oliva.

Con los vinos (cayeron 4 botellas, creo), cafeses y tal la cosa se va casi a los 40 € por cabeza, pero (por la comida, por el local realmente no) vale la pena. Reparto de regalos y a casita a acabar la finale de Lost (que muy bien, oiga...y ahora a esperar hasta enero para el final-final).

El sábado estuvimos de investigación por los alrededores del Museu Picasso, que T tiene que organizar las comidas y cenas del simposio Tourism XXL, a final de mes. Subimos a la fantástica terraza del hotel H10 Montcada (con guiris tomando el sol, por supuesto), entre otras cosas. Por la noche, cena eurovisiva en casa, con guests estelares (e_I & R, ohm) y apariciones sorprendentes, qué diverso es el mundo gay y qué poco lo conocemos. Soraya casi quedó la última, ganó el supuesto actor porno de Noruega y el Barça, campeón de liga sin jugar ayer. Ah, y la cena, riquísima, todo made in Anthonio's mom, su tortilla de patatas es histórica.